jueves, 23 de febrero de 2017

MUERTE SÚBITA: Riesgo, Prevención, Tratamiento

Se considera muerte súbita (MS) la que ocurre de manera inesperada dentro de la primera hora desde el inicio de los síntomas o si se produce en ausencia de testigos cuando el fallecido ha sido visto en buenas condiciones menos de 24 h antes de hallarlo muerto.

La incidencia de MS aumenta gradualmente con la edad, pero de manera significativa a partir de los 35-40 años.

En estudios americanos las principales causas de fallecimiento en este grupo de edad son la miocardiopatía hipertrófica y las anomalías congénitas de las arterias coronarias. Sin embargo, las estadísticas del continente europeo ofrecen resultados sensiblemente diferentes, siendo la miocardiopatía arritmogénica del ventrículo derecho y las miocarditis las patologías más frecuentes.


La MS es el estadio final de una cadena de eventos que conducen a parada cardiaca, en general por fibrilación ventricular (FV), o menos a menudo por una bradiarritmia extrema. En todos los casos, hay una serie de factores moduladores y/o desencadenantes que, actuando sobre el miocardio vulnerable, precipitan la MS.


Las personas que practican actividad deportiva intensa presentan una incidencia mayor de muerte súbita que las no deportistas, 1,6 muertes por 100.000 frente a 0,75 por 100.000. En EEUU, un estudio en el que se practicó autopsia a 126 militares tras sufrir muerte súbita, no traumática, reveló que la mitad presentaban anomalías cardíacas identificables y en el 86% existía una relación temporal con la práctica de actividad física.


La patología cardiovascular, al igual que en la población que no practica deporte, es la causa más frecuente de muerte súbita. Entre el 74 y el 94% de las muertes no traumáticas ocurridas durante la práctica deportiva se deben a causas cardiovasculares.



¿Cómo prevenir la Muerte Súbita?

La mejor forma de prevenir la MS es identificando a los candidatos. No obstante, conocer quiénes son los candidatos que no han tenido síntomas previamente ni tienen factores de riesgo graves que van a sufrir una MS es muy difícil, ya que no es posible hacer un cribado exhaustivo de toda la población.
En primer lugar se requiere de un estudio minucioso de la historia personal y familiar, buscando antecedentes de cardiopatías, y una exploración física diseñada para identificar las lesiones cardiovasculares que pueden provocar muerte súbita o progresión de la enfermedad.
La inclusión del Electrocardiograma de reposo aumenta la probabilidad de identificar a aquellos sujetos de riesgo, pero tiene limitaciones para la identificación de numerosos procesos, como anomalías coronarias; En cuyos casos es de especial relevancia la realización de un Ecocardiograma, por ser una prueba no invasiva y que aporta gran cantidad de información sobre la dinámica cardíaca.



Además de estas pruebas complementarias, una Ergometría o Prueba de esfuerzo, sirve para identificar patologías cardíacas que no se ponen de manifiesto en reposo pero que se muestran con la realización de esfuerzo físico. En esta prueba, a través de unos electrodos colocados en el tórax, se monitoriza la actividad eléctrica cardíaca mientras el paciente realiza actividad física en un tapiz rodande o bicicleta estática.



En cualquiera de los casos, además de una correcta identificación de los pacientes de riesgo, lo principal es eliminar todo el conjunto de factores de riesgo evitables como los ejercicios de alta intensidad, tabaquismo, hipercolesterolemia...



Riesgo de Muerte Súbita identificado, ¿Qué hacer? 

El tratamiento médico con Beta-bloqueantes es importante en el control de síntomas en condiciones tales como la Miocardiopatía Hipertrófica, el retraso en la dilatación de la raíz aórtica en el síndrome de Marfan y la prevención de síncope y Muerte Súbita Cardíaca en el Síndrome QT largo congénito. 
El uso profiláctico de desfibrilador implantado intracardíaco se recomienda en algunos pacientes con Miocardiopatía Hipertrófica, Miocardiopatía Arritmogénica de ventrículo derecho y síndrome de Brugada que son considerados como de alto riesgo de taquiarritmias ventriculares potencialmente mortales.
Los síndromes de preexcitación se manejan mejor con ablación por radiofrecuencia de las vías de conducción eléctrica culpables.
Se aconseja a los atletas con el diagnóstico de miocarditis de abstenerse temporalmente de los deportes de competición hasta que su función cardíaca esté totalmente recuperada.

En cualquiera de los casos, diagnóstico, tratamiento y recomendaciones a seguir vendrá de la mano de un Médico Especialista en Cardiología.




lunes, 13 de febrero de 2017

CÁNCER DE MAMA Y AUTOEXPLORACIÓN

El cáncer de mama constituye la principal causa de muerte por neoplasia maligna en la mujer en el mundo. En España se diagnostican alrededor de 25.000 nuevos cánceres de mama al año. De hecho, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) afirma que 1 de cada 8 mujeres tendrá cáncer de mama a lo largo de su vida.
Aunque una variedad de procesos puede sugerir cáncer de mama por presentarse como nódulos, inflamación o descarga de flujo por el pezón, pocos de estos desórdenes corresponden a tumores malignos; cerca del 80% de las biopsias de mama se informan como lesiones benignas. Aun así es fundamental acudir al médico para valorar la presencia de cualquier anormalidad mamaria.


FACTORES DE RIESGO
El cáncer de mama puede aparecer en mujeres que carecen de factores de riesgo asociados, no obstante, existen una serie de situaciones que favorecen el desarrollo de éste y que por tanto hay que vigilar, como:

1. Edad mayor de 40 años.
2. Nulíparas.
3. Primer parto después de los 30 años de edad.
4. Ausencia de lactancia materna.
5. Menarquía temprana (menor de 10 años).
6. Menopausia tardía (mayor de 55 años).
7. Obesidad posmenopáusica.
8. Tratamiento estrogénico prolongado en la posmenopausia.
9. Antecedente de hiperplasia atípica por adenosis mamaria.
10. Antecedente personal de cáncer en mama, endometrio u ovario.
11. Antecedente familiar cercano de cáncer mamario.
12. Otros.

IMPORTANCIA DE LA DETECCIÓN PRECOZ

Las posibilidades de curación de los cánceres de mama que se detectan en su etapa inicial (in situ) son prácticamente del 100%, de ahí la importancia de ésta.

La autoexploración mamaria se recomienda a partir de los 20 años, pero NO se recomienda la realización de autoexploración de las mamas como ÚNICO método de diagnóstico precoz, debido a su baja fiabilidad. Esta es el primer recurso con que cuenta una mujer para llegar a un diagnóstico temprano de algunos procesos patológicos de la glándula mamaria y en específico del cáncer; más de 80% de los nódulos de mama son diagnosticados por la propia mujer.

No se ha demostrado que la autoexploración rutinaria reduzca la mortalidad por cáncer de mama ni que sea preferible a la detección rutinaria mediante mamografía; no obstante, los tumores detectados mediante esta técnica suelen ser de menor tamaño, asociarse con un mejor pronóstico y ser más fácilmente tratables mediante cirugía conservadora.

En la actualidad se llevan a cabo programas de screening de cáncer de mama dirigidos a las mujeres de mayor riesgo, cuya edad está comprendida entre los 50 y los 65 años, mediante la realización de mamografías cada 1-2 años. 

MÉTODOS AUTOEXPLORACIÓN

A la hora de llevar a cabo las maniobras exploratorias existen diversas formas de realizarlas en función de los movimientos que se realicen la mano exploradora: Radial, Espiral, Vertical...
Si bien esto puede parecer tedioso, cabe destacar que cualquiera de estas formas es válida, siempre y cuando se tengan en cuenta unas premisas, que la palpación sea COMPLETA, BILATERAL, abarque AXILA y PEZÓN, y se haga con los dedo de la mano en bloque, en lugar de separados.



AUTOEXPLORACIÓN
  • Inspección: consiste en observar el aspecto externo de los pechos. Se realiza examinando atentamente cada uno de ellos, comparándolos: frente a un espejo observar tamaño y posición simétricos; vigilar cambios en la textura de la piel (pliegues, huecos, etcétera) o eczemas alrededor del pezón; desviación o retracción del pezón así como salida de secreciones. Este procedimiento debe realizarse con los brazos extendidos sobre los costados y posteriormente con los brazos levantados sobre la cabeza. 

  • Palpación: permite descubrir posibles bultos anormales o nódulos en el pecho. Se realiza preferentemente en decúbito (tumbada), colocando una almohadilla bajo la espalda en la región del seno a explorar. La palpación del seno derecho se realiza con la mano izquierda y el seno izquierdo con la mano contralateral. Con la yema de los dedos y con una presión moderada se inicia la exploración siguiendo la dirección de las manecillas del reloj o en forma de zig-zag, buscando nodulaciones pequeñas. La palpación deberá profundizarse hasta la región axilar de cada lado. 

¿CUÁNDO AUTOEXPLORARSE?
Explórate 7 días después de la menstruación, si ya no reglas hazlo en un día fijo del mes. Si olvidaste hacerlo en la fecha programada hazlo cuando te acuerdes; lo más importante es hacerlo periódicamente, conocer lo que es normal y cómo se sienten las mamas dependiendo del periodo del mes, la edad o de ciertas circunstancias como el embarazo.
Es importante aclarar que la mayoría de los cambios anormales no son causados por cáncer, pero se debe acudir sin retraso al médico, para que valore la necesidad de estudios que lo descarten.
CONCLUSIONES
En el cáncer de mama el pronóstico está estrechamente ligado al momento de la detección, sabiendo que el diagnóstico temprano evita y disminuye en gran medida los procedimientos quirúrgicos radicales, atenúa la repercusión psíquica y sociofamiliar desencadenados de la propia patología y de su tratamiento.
Por ello, ante cualquier hallazgo de anormalidad en la autoexploración mamaria debe acudir a su médico de familia para valoración.