El ejercicio físico es considerado uno de los pilares fundamentales en el tratamiento de la diabetes mellitus, junto con una adecuada nutrición y medicación, puesto que la actividad física juega un importante papel ya que reduce la obesidad.
BENEFICIOS
La mayoría de los beneficios que aporta la actividad física en el manejo y la prevención de DM2 son a través de las mejoras a corto y largo plazo en la acción de la insulina.
· Los efectos inmediatos que podemos observar tras la realización de una actividad física de duración media e intensidad moderada, son el descenso de la glucemia en las 2-72 horas posteriores, debido a cambios en la resistencia muscular a la insulina. Durante la práctica ejercicio físico, tienen lugar contracciones musculares las cuales estimulan el transporte de glucosa al músculo a través de un mecanismo independiente de la insulina que no se ve afectado por la resistencia a dicha hormona.
· Durante la realización de ejercicio físico se produce un aumento del estrés metabólico, este incrementa la oxidación de carbohidratos y mantiene un elevado consumo de oxigeno después del ejercicio. Como consecuencia aumenta la oxidación de lípidos durante el reposo y mejora la tolerancia a la glucosa, la sensibilidad a la insulina y reduce los niveles de glucosa.
· En ejercicio físico moderado los niveles de insulina en plasma normalmente caen, reduciendo así el riesgo de hipoglucemia en aquellos individuos que no toman insulina, incluso en los casos de actividad física prolongada.
· Mejora parámetros fisiológicos como el control glucémico, los picos de glucosa en sangre y el perfil lipídico.
· Incrementan la fuerza muscular, la masa magra y la densidad mineral ósea, lo que permite tener un buen estado funcional y prevenir la sarcopenia y la osteoporosis.
· Puede recuperar la función endotelial y reducir la rigidez arterial, los cuales son factores de riesgo en el desarrollo de complicaciones cardiovasculares en la DM.
· Efectos emocionalmente positivos. El ejercicio aeróbico reduce la ansiedad en sujetos con DM. Además, puede tener efectos positivos en los síntomas de depresión en aquellos pacientes con DM.
· Para los pacientes con DM2 el ejercicio físico resulta positivo ya que mejoran enfermedades como la hipertensión arterial, la hiperglucemia y la dislipemia.
TIPOS DE DEPORTE
Está demostrado que la elevada práctica de ejercicio aeróbico produce pérdida de peso con una mejora significativa en la sensibilidad a la insulina.
Podemos destacar actividades como natación, senderismo, ciclismo, running etc.
Los ejercicios de resistencia permiten a los pacientes con DM desarrollar un control adecuado de la glucosa y reducir la resistencia a la insulina. Los ejercicios de resistencia más común es el levantamiento de peso, existiendo multitud de variables tanto en gimnasios como al aire libre.
Ambos tipos de ejercicio son herramientas útiles para el manejo de la DM, además de eficaces y seguros para los pacientes con alta resistencia a la insulina.
Por tanto, en base a las aportaciones beneficiosas tanto del ejercicio físico aeróbico como del ejercicio de resistencia, para los pacientes con DM2 y para aquellos que están en riesgo de padecerla concluir que una combinación de ambos puede ser más eficaz.
Autora: Luisa María López Trinidad, Grado Enfermería. Máster en Nutrición Humana.